viernes, 23 de diciembre de 2011

¿QUÉ ES UNA LOBOTOMÍA?

¿Qué es una lobotomía?



Lo más seguro es que muchos de nosotros hayamos conocido lo que es una lobotomía a raíz de la película “Alguien voló sobre el nido del cuco” cuando al protagonista caracterizado por Jack Nicholson, le es practicada una de estas intervenciones para dejarlo en un estado casi vegetativo. De hecho, fue la primera vez que mucha gente había escuchado lo que era esto. Para algunos, es la primera cosa que viene a la mente: una operación en el cerebro que hace que la gente violenta se vuelva calmada o incluso vegetativa. En los años cincuenta, las lobotomías eran usadas para tratar muchos tipos diferentes de enfermedad mental, incluida la ansiedad, la depresión y la esquizofrenia. El procedimiento era también realizado en personas que eran consideradas extremadamente emocionales y difíciles de tratar. Mientras que un amplio rangote drogas y otros tipos de terapia están disponibles para tratar las múltiples condiciones mentales, es difícil imaginar que una vez los médicos pensaban que estas operaciones tan drásticas era una manera de curar.

La lobotomía es un tipo de neurocirugía cirugía realizada en el cerebro, conocido como psicocirujía. La idea detrás de esta modalidad es que varios trastornos mentales pueden ser tratados cambiando la forma en que el cerebro trabaja. Los médicos creían que cortando las conexiones de los lóbulos frontales al resto del cerebro, podían calmar las emociones del paciente y estabilizar su personalidad sin dañar su inteligencia y sus funciones motoras. El cortex prefrontal sirve para un número de funciones complejas en el cerebro llamadas funciones ejecutivas. Esto incluye tomar decisiones y planear cosas, razonar y entender, expresar la personalidad, ser creativo y actuar en sociedad de una manera aceptable. Esta área del cerebro está conectada a otras regiones cerebrales, incluyendo el tálamo, el cual recibe las señales sensoriales.
El cerebro está compuesto principalmente de dos tipos de materia diferente: la blanca y la gris. La materia gris incluye las neuronas o células del cerebro, y también vasos sanguíneos y extensiones. La materia blanca se compone de los nervios fibrosos, que conecta las área de al materia gris para poder llevar mensajes entre ellos gracias a impulsos eléctricos. Por lo tanto, una lobotomía era realizada para “cortar” la materia blanca entre las diferentes áreas de materia gris. Las primeras lobotomías fueron realizadas en los años 30 en Portugal. Se hacían taladros en el cráneo en ambos lados y se inyectaba alcohol para destruir la unión entre ambas materias. Sin embargo, este procedimiento tenía demasiadas complicaciones incluyendo dalos a otras partes del cuerpo.

Se utilizó entonces una herramienta llamada leucotome. Después de hacer los agujeros en el cráneo, el médico presionaba en la parte trasera de la herramienta, extendiendo un trozo de metal en el agujero craneal. Al extender y retraer esta pieza, se podía conseguir el corte de las conexiones en la materia blanca. En esta misma década el neurólogo y psiquiatra Walter Freeman, empezó a realizar lobotomías en Estados Unidos, perfeccionando un nuevo método. La técnica consistía en una lobotomía prefrontal, donde se aplicaba al paciente anestesia general. Se intentó conseguir una técnica más rápida, más accesible y más barata, por lo que se decidió hacer la operación a través de la apertura ocular.

Freeman primero practicó esta operación en cadáveres usando un poco de hielo, que es el como se conoció este método. Cuando se empezó a hacer en pacientes reales, uso una variante de la herramienta leucotome, que parecía un pico de hielo llamado orbitoclast. Después de atravesar el hueco del lagrimal, se podía llegar al cerebro simplemente golpeando el objeto con un martillo para romper la fina capa de hueso. Después lo giraba para cortar las fibras. Después era retirada la herramienta y es hacia los mismo en el otro lado. Toda la operación llevaba unos 19 minutos o incluso menos.

Al no requerir taladros en el cráneo, podía ser realizado dejando al paciente inconsciente con electroshock o descargas eléctricas controladas. Al no tener muchos hospitales mentales un quirófano o lugar para hacer intervenciones quirúrgicas, este procedimiento hacia fácil hacerlo en cualquier sitio. Freeman llegó a realizar lobotomías en su propia oficina, aparte de enseñar a otros médicos como hacerlo. ¿Cómo de bien funcionaban estas lobotomías? Lo cierto es que depende a quién preguntes. En la siguiente parte del artículo veremos como se veía este tema.

FUENTE:Salud-y-Remedios.com