sábado, 9 de diciembre de 2017

EL FENÓMENO MUNDIAL DE LA CORRUPCIÓN


La palabra corrupción dentro de un enfoque social y legal se encuentra definida como la acción humana que transgrede las normas legales y los principios éticos. La corrupción puede darse en cualquier contexto, en este caso se analizará la corrupción en el sentido administrativo y político. Corrupcion En un sentido más analítico se puede decir que la corrupción significa el incumplimiento de manera intencionada del principio de imparcialidad con la finalidad de extraer de este tipo de conducta un beneficio personal o para personas relacionadas. Cuando se dice incumplir el principio de imparcialidad, se está siendo referencia en el sentido de que exige que las relaciones personales, no deberían influir en las decisiones económicas que involucren a más de una parte. Por ejemplo, una empresa necesita de un proveedor de papelería, por lo que varias empresas licitan para quedarse con el puesto, sin embargo el encargado de la selección es pariente de uno de los aspirantes, por lo tanto, la licitación la ganará el familiar. La corrupción tanto administrativa como política se refiere a los delitos que se cometen en el ejercicio de un cargo público, para conseguir una ventaja ilegítima, acto que se comete de manera secreta y privada. Las formas de corrupción son muy variadas, algunas de ellas son: El soborno, es el más repetitivo de los delitos contra la administración pública, y que va desde la entrega de una módica suma a un oficial de seguridad, para evitar una multa, hasta el ofrecimiento de grandes cantidades de dinero para la evasión de los impuestos. El tráfico de influencias, este consiste cuando un funcionario utiliza sus influencias para conseguir a favor de alguien allegado (un familiar por ejemplo), una actividad que involucre una posición o un trabajo de beneficio. El Peculado, ocurre cuando un sujeto se enriquece de forma ilegal en perjuicio del Estado. El uso en provecho de los bienes públicos, el uso de materiales y equipos distintas al objeto de su compra; representan actos constitutivos de peculado. Las causas que originan este tipo de actos de corrupción pueden ser internas o externas. Entre las causas internas se encuentran: falta de conciencia social, carencia de educación o de una cultura de compromiso, paradigmas negativos y distorsionados. Como elementos externos de la corrupción se encuentran: impunidad, salarios bajos, concentración de poderes, corporativismo partidista. A nivel político la corrupción genera un impacto negativo al producir y consolidar la desigualdad social, y protege las redes de complicidad entre las elites políticas y económicas. A nivel económico la corrupción influye en el crecimiento de los costos de los bienes y servicios, fomenta la aprobación de proyectos basados en el valor del capital involucrado en los mismos, más que en la mano de obra (lo que es más lucrativo para el que incurre en el delito).
- http://conceptodefinicion.de/corrupcion/ 2014-http://www.politicaexterior.com/actualidad/la-corrupcion-como-problema-global/
En el último episodio de Salvados, Jordi Évole acude a Dinamarca, el país menos corrupto del mundo, y se encuentra con una ciudadanía que ni siquiera recuerda el último caso de corrupción en su país. El contraste con la España de la Gürtel, los Pujol, los ERE y la trama de Francisco Granados no podría ser más brutal. La idea implícita es que el país mediterráneo se ha convertido en un caso aparte en lo que a corrupción respecta. La realidad, por desgracia, es que la corrupción sistémica no es un monopolio español. El precedente europeo más famoso es sin duda el de Italia en los años noventa, cuando el establishment político cayó envuelto en una serie de escándalos de corrupción. Pero la llegada al poder de Silvio Berlusconi fue, como desenlace, exactamente lo contrario a un revulsivo. Francia también ha visto a sus principales representantes políticos salpicados en escándalos de corrupción. Los casos más recientes incluyen al expresidente Nicolás Sarkozy (que llegó a estar detenido por tráfico de influencias), la directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, y el socialista Jérôme Cahuzac, que como ministro de Hacienda resultó tener una cuenta secreta en Suiza. Tampoco se libran las potencias emergentes. El Partido Comunista de China, ante la multitud de escándalos que afectan a sus altos cargos, lanzó en 2012 una “guerra contra la corrupción”. Paradójicamente, el proceso se está llevando a cabo con criterios opacos y una justicia que no es independiente. En Brasil, los indicios de corrupción en la gestión de la petrolera estatal, Petrobrás, se convirtieron en un tema recurrente durante las elecciones presidenciales. En India, la victoria electoral de Narendra Modi se produjo en un clima de hartazgo con la corrupción que deslegitimó al Partido del Congreso. Rusia es el Estado corrupto por antonomasia, gobernado por una oligarquía en la que poder político y económico son uña y carne. No se trata de atenuar los problemas de España, sino de destacar hasta qué punto la corrupción es una lacra internacional. Y una especialmente importante: en 2010, una encuesta global de la BBC descubrió que la corrupción era el problema del que más se habla en todo el mundo. Transparencia Internacional (TI), referencia en el combate contra la corrupción, enumera 18 ámbitos en que puede darse el fenómeno, desde la gestión de recursos naturales a la acción humanitaria. En el sector de defensa, la ONG calcula que hasta 20.000 millones de dólares al año se desperdician debido a la corrupción. En lo que corresponde a la contratación municipal, tramas como la de Francisco Granados encarecen los precios de los servicios hasta un 50%. Aunque la corrupción es un fenómeno que obedece a dinámicas locales o nacionales, existen programas globales para combatirla. TI acaba de lanzar “Destapa a los corruptos”, una campaña global destinada a revelar la identidad tanto de los políticos corruptos como de los empresarios que los corrompen. Un referente de peso es el convenio anticorrupción de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo, diseñado para evitar que empresas multinacionales sobornen funcionarios públicos cuando invierten en el extranjero. El Foro Económico Mundial (FME) mantiene un programa de buenas prácticas empresariales para combatir la corrupción que en 2014 cumple diez años. En los dos últimos casos, la contribución española deja que desear: el país ha firmado la convención pero apenas se molesta en aplicarla, y la única empresa española en adherirse a la iniciativa del FEM es 12 Integrity Iberia. A principios de 2014, Bill Gates comentó, a propósito de la actividad de su fundación benéfica, que la corrupción en países africanos se traduce en un impuesto adicional molesto, pero no un obstáculo existencial para sus programas de desarrollo. Aunque es cierto que la corrupción de las élites no siempre condena a un país al subdesarrollo, es innegable que corroe tanto el funcionamiento de las instituciones públicas como la fe de la ciudadanía en su legitimidad. Solo por esto constituye un reto de primer orden. *********************************************************************************** INFORME "LA NACIÓN" (0) Creció la corrupción en la Argentina desde 1993 Según un informe internacional el país descendió del 15° al 35° puesto en un ranking de honestidad; Corach criticó el estudio: "Es injusto e irresponsable" MIÉRCOLES 05 DE JUNIO DE 1996 Clic Aquí Para la comunidad internacional en la Argentina existe hoy más corrupción que en los años del último gobierno militar. Según un estudio de Transparency International una organización no gubernamental integrada por académicos de 41 países la Argentina ocupa actualmente el puesto 35° en un ranking internacional de honestidad entre 54 naciones con una calificación de 3 41 puntos sobre 10. Durante el período 1989-92 nuestro país promediaba 5 91 puntos ubicándose en la posición 15° y entre 1980 y 1985 tenía 4 94 puntos ocupando el lugar 22°. En diálogo con nuestra corresponsal en Europa el coordinador del estudio el alemán Johann Graf Lambsdorf sostuvo que las razones de la percepción de una mayor corrupción guardan relación con "experiencias recogidas en carne propia por los empresarios internacionales vinculadas con pedidos de coimas" más que con la divulgación de los escándalos por la prensa. Consultado el ministro del Interior Carlos Corach sobre el informe expresó que "es de manifiesta irresponsabilidad" su publicación y afirmó que el gobierno de Carlos Menem "ha dado la más formidable batalla para erradicar la corrupción estructural" que existía en la administración pública. Visiblemente molesto Corach aseguró que "es injusto absurdo y arbitrario hablar de la Argentina en estos términos" y agregó que el Gobierno no había podido verificar la veracidad del informe al que calificó como de "liviandad absoluta". El titular de la Auditoría General de la Nación Enrique Paixao negó que durante la época militar haya habido menos corrupción que ahora aunque reconoció que "no se aplican como se debe las leyes contra la corrupción". La Argentina tiene mala fama en el exterior Corrupción: según Transparency International el índice de honestidad refleja la imagen del país no significa que haya más funcionarios corruptos. LONDRES.- A los ojos de los hombres de negocios la imagen de la Argentina se ha deteriorado notablemente en los últimos años. Pero esto no es lo peor. La mala fama parece ahora ser mayor que durante los peores años del gobierno militar. Así lo afirmó en diálogo telefónico con La Nación el doctor Johann Graf Lambsdorf profesor de la Universidad de G”ttingen y coordinador del índice anual de percepciones de corrupción que acaba de publicar Transparency International. "Lo que más nos llamó la atención en la compilación de las encuestas no es tanto que la Argentina se encuentre ahora en el puesto 35° de honestidad de un total de 54 países sino que su puntaje que había mejorado durante 1988-1992 ahora es inferior al registrado durante 1980-1985 es decir durante buena parte del régimen militar" dijo. Esto quiere decir que la reputación de la Argentina al menos desde el punto de vista de la comunidad empresarial -subrayó- ha caído drásticamente". Con sede en Berlín y en Washington Transparency International es una organización sin fines de lucro cuyo propósito es "hacer notar al gran público el daño cometido por los actos de corrupción desenmascarando de ser necesario a sus autores" y "promover la instauración de legislación que haga imposible su práctica". Fue fundada en 1993 por su actual director el alemán Peter Eigen (por años funcionario del Banco Mundial) a quien acompaña un heterogéneo grupo de académicos de 41 nacionalidades. Su definición de corrupción es "el uso del poder público para el beneficio personal". Desde el año último publica un índice donde 54 países reciben un puntaje de 0 a 10 de "integridad". Un "diez" significa que un país da la impresión de ser "totalmente limpio" mientras que un "cero" corresponde a una nación donde resulta imposible hacer transacciones porque está totalmente dominada por cohechos extorsiones y coimas. "Pero lo que tiene que quedar claro es que nuestro trabajo no es el de determinar si un país es corrupto o no -señaló el doctor Graf Lambsdorff- ni colocarlo en una suerte de basurero del mundo especialmente cuando nos faltan unos 100 países por estudiar. El objetivo es dar a conocer la impresión que tienen de él quienes trabajan dentro de su territorio y fuera de él. Con esto quiero decir que es posible que los funcionarios argentinos de hoy no sean tan corruptos como los del régimen militar. El problema está en que la gente cree que es así." ¿Un mal endémico? "La idea de que la corrupción es parte de la cultura de ciertas naciones es una falacia -puntualizó Graf Lambsdorff-. Más aún diría que es un pretexto que emplean muchos para no hacer nada. Nuestra firme convicción es que todas las sociedades rechazan este tipo de actividades y si prosperan en algunos sitios más que en otros no es porque se las tolere más sino porque se les da mejores condiciones de cultivo. La corrupción está siempre ligada al secretismo. Jamás prospera en un medio ambiente donde la transparencia es norma." En ese sentido Transparency International considera que es necesario penalizar el pago de sobornos y lo hace desde un país como Alemania donde las coimas cuando van dirigidas a ganar contratos en el exterior son aceptadas como "gasto operativo" de las empresas y son así pasibles de ser deducidas de los impuestos. "Tenemos mucho por hacer aquí -admite el coordinador del índice- pero al menos este concepto desapareció en los Estados Unidos. Fue justamente por la presión del público que se aprobó hace ya dos décadas el Acta de Prácticas de Corrupción en el Exterior."http://www.lanacion.com.ar/175367-crecio-la-corrupcion-en-la-argentina-desde-1993...