viernes, 18 de julio de 2014

DÍA DEL MATRIMONIO IGUALITARIO


Abilio Estévez, Literatura Abilio Estévez: “El sexo es la única libertad que uno ha tenido durante muchos años” en Cuba “Yo la homofobia la viví desde muy pronto. Dejé el país cuando sentí que ya no podía más. La viví desde muy joven, desde que entré en la universidad”, declaró el reconocido escritor cubano. El reconocido escritor cubano Abilio Estévez, entrevistado este miércoles por Radio Praga, habló sobre la homofobia en Cuba y las libertades sexuales, al referirse a su última novela, El año del calipso, recientemente publicada por la colección La Sonrisa Vertical, dedicada a la literatura erótica, de la Editorial Tusquets. Sobre el volumen, que supone un giro en su trayectoria profesional, Estévez explica que la novela constituye “una reivindicación, sobre todo de gozar”. “Porque los cristianos nos lo han impuesto siempre, desde que yo tengo cinco años, el valle de lágrimas, el sacrificarse por un futuro que nadie sabe qué cosa es. Hemos visto todo el tiempo que el gozo ha quedado postergado,” señala. Y añade: “El único gozo en el que uno ha podido centrarse es el gozo sexual, porque llega un momento en que a tu habitación ya no pueden entrar y es la única libertad que uno ha tenido durante muchos años en Cuba. Por eso para mí es un país que ha exacerbado su sexualidad, creo yo. Es el único espacio de libertad o de relativa libertad”. Estévez, uno de los autores cubanos más premiados, participó en un coloquio titulado “Literatura y política”, que tuvo lugar en la Universidad de Palacky de Olomouc el pasado fin de semana. Preguntado sobre las razones que lo llevaron al exilio —el autor reside actualmente en Barcelona, España—, Estévez explica que no fueron estrictamente políticas, sino más relacionadas con la homofobia imperante en Cuba. “Yo la homofobia la viví desde muy pronto. Dejé el país cuando sentí que ya no podía más. La viví desde muy joven, desde que entré en la universidad, que para mí fue un infierno justamente por problemas de la homofobia”, dice. Como homosexual en la Isla, “Uno siempre (…) era sospechoso de todas las desviaciones ideológicas posibles, como se decía. Y la verdad es que al final llega un momento de fatiga, que fue con 46 años, que dije: ‘Ya no puedo más’”. Estévez explica que las sociedades latinoamericanas tienden a ser homófobas debido al machismo. Sin embargo, añade que “el problema está en que la Revolución todo lo convirtió en un problema de Estado. Entonces que haya homofobia en un pueblo de Argentina, de Colombia, es una cosa, pero que el Estado ya lo convierta en un enemigo es terrible”. El futuro de Cuba Ante la pregunta de cómo se imagina a Cuba dentro de 20 años, el poeta, dramaturgo y cuentista cubano, tras aclarar que se trata de una interrogante difícil de responder, señala que percibe el futuro de la Isla con “bastante pesimismo”. “Veo lo que ocurre en Rusia, por ejemplo. Ahora las grandes empresas en Cuba las están dirigiendo ya los antiguos oficiales del Ejército. Entonces ya se está creando ahí un camino, una casta, una elite que al final será posiblemente la que se haga con todo”, dice. El autor considera que la sociedad cubana seguirá el camino de Rusia, “en el que los antiguos miembros de la seguridad del Estado o del Ejército serán los que dirijan ese futuro”. “Tras más de 50 años de dictadura, será muy complicado crear una auténtica democracia en el país”, opina. “Creo que el proceso hacia alguna democracia también va a ser muy difícil porque se ha perdido la idea de democracia. O sea, se ha perdido en el interior de uno mismo, en Cuba hubo un proceso democrático de pensamiento fuerte en un momento determinado, pero eso se ha cortado y lo que yo veo es que la gente misma ya no tiene un sentido democrático de la vida”. Embargo A pesar de sus críticas al régimen cubano, Estévez no se muestra entusiasta de las políticas duras de otros gobiernos, como el de la República Checa, hacia la Isla, pues suponen un peso adicional a las penurias de los ciudadanos que residen en ella. “Hay 11 millones de cubanos que no se merecen vivir cada vez peor, a pesar de que viven tan mal ya. Quizá desde un punto de vista político a lo mejor, no estoy seguro, es una posibilidad de que el proceso fuera más rápido. Pero no creo que sea justo empobrecer más a una gente que está ya como estrangulada”. Añade que el embargo norteamericano es un ejemplo de que estas sanciones no consiguen su objetivo político. “¿Qué ha pasado con el bloqueo norteamericano? No ha resuelto nada. Incluso, además de no resolver nada, le ha dado un arma al régimen para tener un enemigo. Un Gobierno de ese tipo tiene que tener un enemigo para legitimarse”. El escritor, nacido en La Habana y nacionalizado español, ha publicado también las novelas Tuyo es el reino (Premio de la Crítica Cubana, 1999), Los palacios distantes, Inventario secreto de La Habana y El bailarín ruso de Montecarlo, además de poemas, cuentos y teatro.