sábado, 28 de noviembre de 2015

EL ORIGEN DE LOS GITANOS (Nota número tres)


Comportamiento social Así como los judíos, los gitanos asumen distintos parámetros de comportamiento para las relaciones con su propia gente y para la interacción con los extraños, de modo tal que se puede afirmar que la oposición rom/gaché y judíos/goyim son reguladas en manera muy similar, quizás idéntica en casi todos los detalles. Siendo que los gaché no conocen las leyes que conciernen al marimé, son sospechados de ser impuros o se supone que lo sean; algunos rom ni siquiera entran en casas de gaché - la misma costumbre existía en el antiguo Israel, y todavía es practicada por los judíos ortodoxos. Los gaché que se hacen amigos de los gitanos son admitidos cuando conocen las reglas y las respetan de modo que no ofendan a la comunidad, después de haber superado algunas "pruebas" de confiabilidad. Por otra parte, las instituciones gaché se usan como "zona franca", donde se pueden realizar actividades impuras con seguridad - un ejemplo típico es el hospital, que permite evitar de montar una tienda especial para el parto. Cortesía, respeto y hospitalidad son obligatorios entre los gitanos. Cuando se saludan cada uno debe preguntar por la familia del otro, deseando bien y bendición para todos los miembros, aunque sea la primera vez que se encuentran y en realidad no se conozcan las respectivas familias. La propia presentación incluye los nombres de los padres, abuelos y todas las generaciones que se recuerden - el nombre y apellido civiles no tienen importancia; los gitanos se llaman como en el antiguo Israel, A hijo de B, hijo de C, de la familia de los D. Ésto es común a varios pueblos del Medio Oriente, pero el modo como lo hacen los rom es particularmente bíblico. Las causas judiciales entre rom se presentan a la asamblea de ancianos, exactamente como en la Ley Mosaica. La asamblea de ancianos rom se llama "kris", y es una verdadera Corte de Justicia, cuyas sentencias deben ser obedecidas, contrariamente la parte inobservante puede ser excluida de la comunidad romaní. Los casos generalmente no son tan serios como para nos poder ser resueltos con el pago de una multa o resarcimiento, como está regulado en la Toráh (Éxodo 21:22; 22:9; Deuteronomio 22:16-19). Hay muchos otros aspectos que pueden ser de importancia secundaria, que de todas maneras recuerdan las antiguas costumbres y reglas israelitas. Lamentablemente, tales detalles se van perdiendo con las nuevas generaciones (como muchos se han perdido entre los judíos también) por causa del sistema de la sociedad moderna que restringe la libertad de individuos y comunidades "exóticas". Sin embargo, los sentimientos y tendencias gitanas deben ser tomados seriamente en cuenta, porque corresponden a una herencia psicológica ancestral que se ha transmitido de generación en generación, en manera subconsciente pero reclamando los propios orígenes. Por ejemplo, los gitanos no sienten absolutamente ninguna atracción hacia la cultura o la música de la India (lo que es mas, las mujeres gitanas tienen un timbre de voz bajo, en contraste con las cantantes indias; un detalle que puede ser insignificante, pero quizás no), mientras que gusta mucho entre los rom la música del Medio Oriente. En Europa oriental, la mayoría de las expresiones musicales son o judías o gitanas, y muchas veces la misma obra es atribuida o a una o a otra de éstas dos tradiciones. Las bandas de "klezmorim" han sido muchas veces compuestas de rom junto con judíos, y el jazz de estilo europeo ha sido cultivado por gitanos y judíos. El flamenco es probablemente de origen sefaradita, practicado por los judíos antes de ser expulsados de España, y luego heredado y desarrollado por los gitanos. En otros aspectos, los rom tienen una gran habilidad comercial (y si es necesario trabajar en sociedad, los judíos son preferidos) y aquellos que eligen insertarse profesionalmente en la sociedad gachí prefieren las mismas carreras que eligen los judíos (probablemente por motivos relacionados con las leyes de pureza ritual, que no permiten de ejercitar cualquier tipo de trabajo). En fin, aunque no menos importante, los gitanos hacen una distinción entre los comunes "gaché" y los judíos, que no son considerados completamente gaché sino una categoría intermedia que observa las leyes de pureza ritual y por lo tanto no están sujetos a sospechas. (Ver también: La Ley Gitana) Conclusión: Éste breve estudio tiene como objetivo establecer las bases para una nueva, diligente y seria investigación acerca del origen del pueblo rom y sinti que sea fundada sobre aspectos culturales y espirituales en lugar de seguir insistiendo con una línea exclusivamente lingüística que lleva a una posición equivocada. Las evidencias presentadas no excluyen categóricamente que los rom puedan haber habitado en Kannauj o alguna otra parte de la India, aunque el valle del Indo parece ser la región mas apropiada, sino que demuestra que de todas maneras los gitanos no pertenecen a las etnias indias (y tanto menos arias), y que sus raíces son semíticas y mas precisamente hebraicas. Grupos israelitas eran numerosos en la India, y ha sido posible redescubrir algunos de ellos dejando de lado la indicación lingüística (porque todos ellos hablaban lenguas indias) y concentrando la investigación en indicios culturales que revelan el verdadero origen, tales indicios han sido hasta hoy menos determinantes que los que podemos encontrar en la cultura romaní, y sin embargo han sido suficientes para reconocer la etnicidad israelita. Sándor Avraham Mapa de las migraciones (en inglés) Lectura adicional Un estudio detallado sobre el desarrollo histórico de los hechos demuestra que la teoría del origen en Kannauj es insostenible. Las crónicas de la conquista gaznávida relatan que el número de prisioneros era de dimensiones increíbles, y la crueldad más allá de la imaginación: una vez que todos los soldados capturados en Kannauj fueron asesinados, cientos de miles de cautivos civiles fueron atados, fustigados, humillados, forzados a convertirse al islam y finalmente vendidos en los mercados de esclavos. No es necesario dar una descripción minuciosa de esas campañas de terror en este estudio. Algunos teóricos especulan que el origen de los gitanos puede hallarse en estas deportaciones masivas: es verdaderamente difícil imaginar que esos prisioneros, que fueron vendidos como esclavos, esparcidos en todo el imperio y forzados a hacerse musulmanes puedan haber hallado la forma de escapar como un grupo organizado, compuesto por un pueblo que tenía la misma lengua y cultura, sin el más mínimo vestigio de islamización y con una meta bien definida: llegar a las tierras cristianas de Occidente. Tal hipótesis aparece imposible, considerando la aniquilación sistemática de la personalidad ejercida sobre los cautivos por parte de los opresores gaznávidas. La cronología del Valle del Indo (en inglés) nos provee la correcta secuencia de los hechos y caracteres étnicos, sociales, culturales y religiosos que se sucedieron a través de los siglos en esa región, y nos da la clave para entender el origen de este pueblo y las razones de su éxodo hacia Occidente. Disponemos de suficientes elementos para sostener la hipótesis que las causas de la migración romaní fueron principalmente de índole religiosa, no sucesivas a las invasiones musulmanas sino anteriores, por la consolidación de la hegemonía hinduísta durante la era Rajput. Los primeros relatos de la llegada de los gitanos a Europa indican una identidad religiosa, más bien que étnica: ya sean verdaderas o no, las razones que alegaban los gitanos para obtener permisos y salvoconductos para atravesar las fronteras eran peregrinaje, persecución religiosa y otros motivos similares, habiéndose siempre identificado a sí mismos, desde el principio, como cristianos. La fé nazarena llegó al Valle del Indo durante el siglo I c.e. Según los escasos documentos en existencia, este credo fue adoptado por los israelitas exiliados que ya estaban presentes en la India desde el siglo IV bce. Aunque algunas tradiciones no deben ser consideradas seriamente como hechos verídicos hasta que los eventos a los que se refieren sean probados históricamente, una vez verificado el relato merece crédito al menos en la medida que permitan las evidencias. Uno de los antiguos textos literarios que fue considerado como leyenda es el libro apócrifo de los Hechos de Tomás, que en el capítulo 17 narra que el Apóstol Tomás visitó la corte del rey Gondapharna en Punyab. El historiador Eusebio de Caesarea, en Historia Ecclesiastica, III.1, menciona a Tomás como el Apóstol enviado al Reino de los Parthos. Gondapharna ha sido considerado como una figura legendaria por los historiadores, hasta que su existencia fue verificada en 1872, y el periodo en que reinó fue establecido gracias a una inscripción datada en el año 26 de su reino, que era el año 47 c.e. En base a este descubrimiento y a la investigación sucesiva, es inevitable reconocer que el autor de los Hechos de Tomás estaba muy bien informado por fuentes contemporáneas, ya que el nombre de ese rey no podía haber sido conocido por escritores de un periodo posterior. Después de esta primera llegada del cristianismo al Valle del Indo, los misioneros asirios realizaron un extensivo trabajo de evangelización en todo el continente, así como otros emisarios que transmitieron las epístolas escritas en griego, que llegó a ser lengua común entre los cristianos en todas las tierras anteriormente conquistadas por los ejércitos de Alejandro y ampliamente usada por los pueblos helenizados. En este punto podemos recurrir a la lengua romaní para hallar algún indicio que ayude a reconocer el antiguo credo de los gitanos, cuando estaban todavía en el exilio en el Valle del Indo. Uno de los términos que ningún estudioso ha logrado explicar en manera satisfactoria es el mismo etnónimo de este pueblo: "Rom". Se han formulado teorías especulativas con el fin de encontrar algún origen sánscrito de esta palabra, sin poder dar ningún resultado convincente. En lugar de una denominación étnica, este término podría haber indicado una identidad religiosa: Ρωμαίοι (Romaioi), es decir, cristianos. Otra palabra de la lengua romaní que nos lleva a la misma conclusión es khangheri, que hoy se traduce como iglesia. Efectivamente, este término indica específicamente o sinagoga o templo cristiano, sin otro significado. ¿Por qué la lengua romaní tiene esta palabra para designar un lugar de culto, y no algún término sánscrito equivalente para templo hinduísta o stupa budista? ¿Por qué tampoco existe ninguna palabra romaní para mezquita? El escenario en el cual el éxodo romaní tuvo lugar es más comprensible si consideramos el principio de la opresión de los brahmanes y la inclusión forzada en el sistema de castas como la razón por la cual un grupo organizado de personas, con una cultura, leyes y conceptos religiosos bien definidos, decidiera emigrar en una dirección precisa: los reinos cristianos de Occidente. También es razonable ubicar esta migración antes de las invasiones musulmanas: era prácticamente imposible que personas que fueron esclavizadas y forzadas a convertirse hayan podido escapar en un periodo tan breve como para no haber conservado ningún término árabe o turco en su lengua, ni tampoco costumbres u otros elementos culturales (la influencia turca en los grupos romaníes balcánicos tuvo lugar en Europa, durante la dominación otomana, puesto que los Balcanes y Anatolia eran dominio romano-bizantino cuando los gitanos llegaron a Europa). Los gitanos estuvieron en Armenia mientras la región permaneció bajo dominio cristiano, antes de entrar en Europa. Cuando los gitanos decidieron abandonar la tierra en la cual habían vivido durante siglos, tenían una meta bien definida: los reinos cristianos del Occidente. Ellos partieron con la máxima prisa para alcanzar las tierras a las cuales se dirigían, sin permanecer por mucho tiempo en los países que encontraron en su camino. Las características particulares de la Ley Romaní nos proveen de muchas claves para conocer las razones de tal éxodo. Eran un pueblo diferente, con una antigua tradición semítica, profundamente influenciados por el misticismo mazdeísta y por el estilo de vida de los escitas.